Agua de Cuzco

Es permanente la presencia de la piedra.
Son lizos sus contornos.
Son permeadas de jugo de pisco, de agua de Cuzco.

Piedras que rien, nefastas, hermosas.
Risotadas burlonas por toda la estupidez que se ha acumulado sobre ellas.

Lo han dicho y repetido. Una y otra vez.
Esa no es su forma natural. Nunca lo fue.

Su vestir es gris y es plateado
Y reluce no a la teja que las cubre por encima sino al sol.

Todo apuntado directamente a sus sombras.
Toa luz tiene una sombra.

Gracia. Aqui, en donde me hicieron guerra.
Aqui, es donde encuentro paz.

Encuentro sol. Encuentro, encuentro.
Es el punto de arribo. No hay pereza.
Una montana alta, interminable. Altitud. En la selva.

Mandalas indigenas, de esas que me hicieron. Efusivas. Y conservadas. Escondidas.

Para siempre y hoy. Esta es la primera pagina. Que espero?

[Cuzco - Dic 2011]